Volar – cambiar el inicio de la historia para cambiar la historia completa
Cada vez tenemos más y mejor evidencia sobre cómo asegurar que las prácticas de crianza y cuidado en el hogar sean adecuadas y de calidad. Pero esta evidencia requiere que programas pioneros la utilicen para guiar sus actividades y enfoques. Volar es un proyecto innovador precisamente porque utiliza la evidencia en Desarrollo Infantil Temprano y las ciencias de comportamiento para fomentar el crecimiento sano y los vínculos emocionales entre niñas y niños y sus cuidadores. Además de aprovechar la estrategia de visitas domiciliarias, el programa también incorpora mensajes de texto, spots radiales, y videos didácticos para difundir contenido sobre la importancia de los vínculos afectivos, así como de las prácticas de higiene y manejo adecuado del agua. El diseño de Volar se basó en experiencias exitosas en otros contextos, adaptando materiales y estrategias al contexto del Perú.
Problemática
Menos de la mitad de las niñas y niños peruanos entre 9-12 meses de edad tienen una interacción adecuada con sus madres, padres, o cuidadores. Solo un tercio de las niñas y niños entre los 13 y 18 meses tiene niveles de comunicación verbal afectiva adecuada para su edad. Además, solo un 31% de los hogares con acceso a agua bebe agua con niveles de cloro necesarios para eliminar causantes de enfermedades. Estas estadísticas revelan una historia clara: se necesitan estrategias integrales de Desarrollo infantil temprano que promuevan el acceso a agua segura e higiene, informen el rol principal de madres y padres y fortalezcan los vínculos afectivos con sus hijos.
Solución
Volar plantea un modelo enfocado en dos ejes. El primer eje, Crecer Mejor, fomenta las interacciones de calidad entre niñas y niños y sus cuidadores a través de: talleres para fortalecer las capacidades de las agentes comunitarias y la efectividad de las visitas al hogar; videos sobre crianza para los padres que se muestran usando tabletas; mensajes de texto para madres y padres con información sobre crianza; y spots de radio para difundir actividades que fortalecen el desarrollo de los niños. El segundo eje, Agua Segura, busca asegurar el crecimiento físico de niñas y niños a través de mejoras en los conocimientos, comportamientos y actitudes en temas de agua, saneamiento e higiene y también cuenta con cuatro intervenciones: un programa en las escuelas iniciales orientado a mejorar comportamientos y conocimientos de higiene; educación sanitaria por barrio y visitas domiciliarias; ferias familiares; y fortalecimiento de la gestión de las organizaciones comunitarias para el mantenimiento y operación del sistema de agua.
Evaluación e Impacto
Entre septiembre de 2019 y enero de 2020 se llevó a cabo una prueba piloto para evaluar los canales de llegada a las familias y analizar la utilidad y relevancia de los materiales. Durante el piloto se capacitaron 94 actores comunitarios, se beneficiaron 600 hogares y 1.150 niños. En la siguiente etapa, se busca ajustar el modelo y escalar el proyecto utilizando las lecciones obtenidas del piloto.