Proyecto Pensalo – Mejorando las habilidades matemáticas de los niños a través de tecnologías educativas
La tecnología se nos presenta hoy en día en múltiples formas y dispositivos: laptops, smartphones, tablets, etc. Pero para los niños más pequeños, se debe ser aún más creativo, especialmente si queremos aprovechar la tecnología como herramienta de aprendizaje. En este sentido, el proyecto Pensalo fomenta las habilidades numéricas y de programación de las niñas y niños a través de un innovador actor: Betico, un robot que los estudiantes pueden programar y con el cual deben cuestionarse y resolver problemas. Esto, sin duda, es mucho mejor y más divertido que solo enfocarse en memorizar conceptos matemáticos.
Problemática
América Latina y el Caribe se encuentra en la cola del ranking de países en su desempeño en matemáticas (PISA). El aumento en cobertura de educación primaria no se ha visto acompañado por mejoras en el aprendizaje de las niñas y niños, desaprovechando la oportunidad de equiparlos con habilidades pre-matemáticas que les servirían para desarrollar más competencias durante toda la vida. En Costa Rica y ALC hay poca evidencia sobre estrategias exitosas que desarrollen este tipo de habilidades. Así mismo, existe una necesidad de generar y probar iniciativas creativas para la enseñanza y el aprendizaje aprovechando la tecnología con acompañamiento docente.
Solución
El programa en implementación evalúa el efecto del uso de tecnologías en las habilidades de programación y matemáticas de los niños en edad preescolar. Las escuelas que reciben el programa Pensalo realizan sesiones de 40 minutos 4 veces a la semana, en las que los niños deben programar el robot. En este sentido —y necesariamente— Betico no trabaja solo: maestros y padres forman parte del programa. Por un lado, los maestros adquieren entrenamiento sobre su funcionamiento, reciben visitas mensuales de un tutor que les puede dar sugerencias para mejorar las sesiones y cuentan con tarjetas con información, una guía, y un cuento que introducen los conceptos necesarios para programar el robot. Por otro lado, los padres también reciben el cuento y son motivados a leerlo a los niños en casa.
Evaluación e Impacto
En proceso. Se asignaron 392 escuelas de forma aleatoria a un grupo de tratamiento que recibe el programa Pensalo, y un grupo de control que no recibe el programa. Las clases de matemáticas serán grabadas en una muestra de 30 escuelas, para monitorear la calidad de la implementación. Próximamente sabremos si Betico acompañado de docentes y padres aumenta las habilidades pre-matemática.